From: Daniel Garcia Moreno Date: Wed, 16 May 2012 22:17:06 +0000 (+0200) Subject: Segundo capítulo, quién ere X-Git-Url: http://git.danigm.net/?p=parado.git;a=commitdiff_plain;h=HEAD Segundo capítulo, quién ere --- diff --git a/TIMELINE b/TIMELINE index c1700ae..6eee1fe 100644 --- a/TIMELINE +++ b/TIMELINE @@ -18,4 +18,5 @@ ??. Policía ??. Loco ??. Escritor +??. Padre? ??. Hasta luego diff --git a/src/02.quien-eres.txt b/src/02.quien-eres.txt new file mode 100644 index 0000000..3be60ae --- /dev/null +++ b/src/02.quien-eres.txt @@ -0,0 +1,192 @@ +A pesar de la sorpresa y el desconcierto inicial, Francisco no estaba +dispuesto a dejarse intimidar por esto. Era un profesional que había +tenido que tratar con diferentes tipos de locos y como tal estaba +dispuesto a recobrar el control de la situación. + +Sin embargo, es bien sabido que discutir con un loco es algo bastante +absurdo, por lo tanto Francisco cogió la silla que quedaba libre, la +colocó frente a la otra y se sentó. Francisco era un hombre ordenado, +y como tal, se sintió algo molesto con el cambio de posiciones. Pero +tampoco es que fuera una persona insistente, se consideraba adaptable +a los cambios y pensó que lo mejor sería seguirle el juego. + +- Bueno, ya estamos un poco más cómodos -dijo Francisco un poco + molesto-. Soy el doctor Francisco Gutiérrez y me encargo de tu + evaluación. Hay algo raro en tu ficha -continuó hablando mientras + abría la carpeta y señalaba los folios con el dedo-, por lo visto no + te han podido identificar. ¿Cuál es tu nombre? + +Era una pregunta directa, era de suponer que le habrían hecho esa +pregunta unas cuantas veces desde su detención, pero quién sabe, en +ocasiones ocurre que simplemente nadie hace la pregunta adecuada. + +- Encantado de conocerte Francisco -contestó haciendo un gesto + exagerado con la mano-, no es una pregunta muy original, me lo + preguntan mucho últimamente. Sin embargo a ti te voy a contestar, + porque tenemos mucho de qué hablar y me gustaría empezar con buen + pie. + +Orgulloso de su habilidad y destreza, Francisco se irguió un poco y +una leve sonrisa empezó a aparecer en su cara. + +- Realmente no tengo nombre -continuó el extraño hombre-, no me + malinterpretes, hace mucho tiempo tuve uno, o creí tenerlo. Pero lo + perdí, entre muchas otras cosas perdí mi nombre. + +La sonrisa en la cara de Francisco fue efímera y de repente su rostro +volvió a mostrar sorpresa. Este hombre no iba a ser nada fácil, así +que lo tendría en cuenta para no cantar victoria antes de tiempo. + +- Suponiendo que algo como un nombre se puede perder -empezó a decir + Francisco-, aunque no tengas nombre, necesito una forma de llamarte, + de identificarte, tengo que poner algo aquí en la carpeta, ¿Cómo + quieres que me refiera a ti? +- Sí, esa pregunta me gusta más. Puedes llamarme Parado. +- Vaya -dijo Francisco algo sorprendido-, Parado no es un nombre + muy común. +- Sin embargo -contestó Parado- es muy utilizado últimamente para + referirse a muchas personas. + +El interés de Francisco por el extraño personaje que se hacía llamar +Parado comenzaba a crecer, no parecía un loco cualquiera, contestaba +normalmente a las preguntas y dialogaba como una persona cabal, +obviando el tema del nombre, Francisco empezaba a pensar que quizás +este hombre estuviera más cuerdo de lo que había esperado en un +principio. + +El silencio se paseó por la sala mientras Francisco asimilaba la +información que había conseguido de aquel hombre, no era un silencio +incómodo, porque Francisco no era consciente del mismo y porque la +otra persona en la sala era un loco. + +Mientras el silencio se hacía cada vez más grande y antes de que +empezara a molestar, Francisco se decidió finalmente. Intentaría ser +lo más directo posible. + +- ¿Quién eres? La policía no ha conseguido identificarte y hoy en día + es algo muy extraño que una persona no esté identificada. +- Soy yo, antes no me conocías, y ahora sabes que existo. Es verdad + que no han podido identificarme. Mi identidad se perdió con mi + nombre hace ya mucho tiempo. Ser un número más está bien, pero llegó + un momento en mi vida en el que dejé de ser un número y pasé a ser + yo. + +Esta respuesta no era una sorpresa para Francisco, tenía toda la pinta +de una respuesta típica de un loco, alguien que vive en su mundo +paralelo y que no tiene los pies en la tierra. Sin embargo estas +palabras tenían algo de verdad y Francisco sabía leer entre líneas. +Hizo algunos apuntes en la ficha para no olvidar lo que se le había +pasado por la cabeza. + +- Vale -comenzó a decir Francisco-, parece que con respecto a tu + nombre real y tu identidad no vamos a avanzar mucho. De momento lo + dejaremos aparcado. Quizás quieras hablar un poco de cómo has + llegado hasta aquí, ¿Sabes por qué estás aquí? +- Estoy aquí para hablar contigo. +- Sí claro -contestó Francisco mientras se apretaba el comienzo de la + nariz cerrando los ojos-, estás aquí para hablar conmigo y yo estoy + aquí para hablar contigo, pero no me refería a eso. Quiero decir que + si sabes por qué te han detenido y por qué te han traído a este + centro. + +Parado se inclinó hacia delante, y adoptó una postura pensativa +tocándose suavemente la barba. + +- Claro, me han detenido y como no tengo un número identificativo + creen que estoy loco. Y quizás lo esté, según la definición de loco + que manejemos. Parece que últimamente se utiliza la palabra loco muy + alegremente. Cualquier persona que piense que un mundo diferente es + posible es un loco. Quizás debería empezar a utilizar ese nombre... + "Loco", suena bien, aunque pensándolo bien "Parado" tiene mucho más + significado para mí, así que puedes seguir llamándome Parado. + +Un recuerdo sobre clases de filosofía insufribles pasó de puntillas +por la memoria de Francisco. Esta reflexión sobre la locura despertó +recuerdos de juventud en el doctor, sin embargo, y como profesional +del tema, sabía que no debía dejarse embaucar por la dialéctica y el +juego de palabras. Un loco es un loco. + +- Bueno, no vas del todo desencaminado. No sé si lo sabrás, pero en + este país es ilegal ir indocumentado por ahí. Es ilegal no tener + un documento identificativo y si un policía te lo pide y no lo + tienes, pueden detenerte. Con respecto al tema de la locura, para + eso estoy yo aquí. Es verdad que estás aquí porque hay quién cree + que estás loco, pero al final seré yo quién diga si lo estás o no, + y ese es el objetivo de esta charla. +- Ese es tú objetivo -contestó Parado secamente-, yo he venido aquí + con otra idea en mente y espero que hablando podamos cada cual + buscar nuestro objetivo. +- Realmente no has venido aquí -comenzó a decir Francisco-, te han + traído, estás privado de libertad y obligado a venir a hablar + conmigo. +- Que no tenga la opción de no venir aquí no implica que haya venido + en contra de mi voluntad. Quiero estar aquí y quiero hablar contigo, + por eso no hay nada incorrecto al decir que yo he venido aquí. + +El recuerdo de las clases de filosofía ya dejó de andar de puntillas y +comenzó a dar fuertes pasos que retumbaron en la mente de Francisco +haciendo más daño del esperado, nunca le había gustado la filosofía. +Sin embargo, este hombre parecía saber más de lo normal. + +- ¿Y con qué objetivo has venido aquí? -preguntó Francisco- Si has + venido por voluntad propia para hablar conmigo. +- Aunque hace ya algún tiempo perdí muchas cosas -comenzó a decir + Parado-, esa perdida me trajo algo que hasta entonces no había + tenido y creo que es algo que te puede interesar. +- ¿Crees que tienes algo que me pueda interesar? -preguntó Francisco + algo sorprendido- ¿Estás intentando sobornarme para que te declare + como cuerdo? +- No, simplemente tengo algo que quiero regalarte, como quieras + declararme carece de importancia. He venido hasta aquí para darte + algo y si no me equivoco te gustará. + +La charla había pasado de ser algo un poco extraño a ser algo +totalmente inesperado y sorprendente para Francisco. No sabía cómo +enfrentarse a esta situación. Sin embargo, Francisco era un hombre con +recursos, y también con curiosidad, en realidad tenía más curiosidad +que recursos, pero como era un hombre ordenado la curiosidad andaba +algo escondida en un bonito cajón de su mente. + +Sin embargo, el extraño hombre que tenía enfrente parecía tener la +capacidad de desordenar todo a su paso y había tocado ese bonito cajón +donde Francisco guardaba su curiosidad, y como llevaba ahí tanto +tiempo no pudo retenerla y de repente una gran curiosidad inundó a +Francisco que no quería otra cosa más que saber de qué narices hablaba +este extraño hombre. + +- ¿Y qué es eso que tienes para mi? +- Tengo una historia -contestó Parado solemnemente mientras levantaba + un dedo hacia arriba y subía las cejas arrugando la frente más de lo + que cabría esperar en una cara normal. Sus ojos se vieron grandes y + profundos en esa extraña cara. Ahora sí que tenía toda la pinta de + un loco de verdad. + +Podría parecer una tontería, una banalidad, algo por lo que nadie +hubiera dado nada. Pero una historia es lo más valioso que puede tener +un hombre y Francisco no tenía ninguna. Desde pequeño Francisco había +leído cuentos y novelas. Había devorado libros y desde muy temprana +edad siempre había querido escribir algo, contar una historia al +mundo, pero sin embargo nunca había encontrado una historia que +contar, era lo que siempre había deseado tener y ahora tenía un hombre +con el pelo largo y gris, barba y seguramente piojos, que decía haber +ido hasta allí para regalarle su historia. + +Francisco se sorprendió más de lo que nunca se había sorprendido. +Estaba realmente ilusionado y tenía una gran curiosidad por conocer la +historia de este hombre, pero sin embargo este hombre era un loco y +parecía conocer lo más profundo de su ser. Este hecho perturbó un poco +a Francisco y le hizo dudar, quizás había sido casualidad, no podía +ser posible que este hombre, al que nunca había visto ni remotamente +supiera algo sobre sus ganas de escribir o sobre su búsqueda de una +historia. + +- ¿Una historia? ¿No es algo raro para regalar a alguien? +- Sé que es algo que llevas buscando mucho tiempo. + +Definitivamente no podía ser una coincidencia, tenía un hombre delante +que decía que había ido hasta allí para regalarle una historia, +aquello que llevaba toda su vida buscando sin éxito. Podría ser verdad +o no, podría ser la historia que andaba buscando o no, pero el simple +hecho de estar tan cerca de algo que había buscado durante tanto +tiempo le hizo sonreír y de repente se sintió más feliz de lo que se +había sentido nunca.